Citric acid es un formador que puede encontrarse también en una amplia variedad de productos domésticos, como detergentes para ropa, champús y limpiadores. Por supuesto, citric acid también puede encontrarse en las frutas cítricas, como naranjas, limones y limas. Lo usamos para hacer que una fórmula de producto limpie mejor al afectar a las moléculas en la fórmula para que actúen mejor juntas. Citric acid también puede ser un regulador de pH que altera el pH de un producto para mejorar la estabilidad. Cada fórmula tiene un pH óptimo para que actúe mejor. Por ejemplo, una fórmula más ácida actúa mejor para eliminar los residuos de jabón. Por el contrario, una fórmula más alcalina, podría ser más efectiva como limpiador de alfombras. Utilizamos reguladores de pH para asegurarnos de lograr el mejor pH para una tarea en particular. Además, el pH de una fórmula puede afectar el tiempo que dura dentro de un envase, por ejemplo, limitando su tendencia para corroer una lata, un envase o un surtidor. A veces también usamos citric acid como agente limpiador que elimina los depósitos de agua dura, o como quelante.